La poesía gay mexicana: una muestra de Monterrey
Posted: July 9, 2012 Filed under: Alejandro del Bosque, Antonio García, Jorge Cantu de la Garza, Spanish, Xorge M. González, ZP Translator: Alexander Best | Tags: Poesía gay mexicana Comments Off on La poesía gay mexicana: una muestra de MonterreyJorge Cantu de la Garza (1937-1998)
Antes de partir
De amor, amor, nunca he escrito un poema.
He de hacerlo ahora pues me dicen que la muerte se aproxima
y sé que Amor amorosamente me ha tocado
como la aurora, con uno de sus rosados dedos.
*
No es sólo del joven que, apenas salido de la adolescencia
comparte hoy sus días con quien esto escribe
de quien escribiré. Si hablo en singular
es porque todo el amor es uno
y de ello pongo a cualquier hombre por testigo.
*
Fui al pozo del limo con mi cántaro vacío
infinitas veces, como amanece.
Y siempre fue, como la primera vez,
la inauguración del Universo
con sus arreboles y huracanes
llenos de siempres, nuncas, vida mía.
Y luego había que partir, dolorosamente.
Recuerdo tantas despedidas.
*
Ven, amado, y contempla el ejército
de ángeles que te precede,
ven y mira cómo sobrevivieron
aunque ellos, igual que tú, que yo,
pensaron que el fin de nuestro amor
era el fin del mundo.
Toma ejemplo, amado, para que vivas
cuando yo te falte.
*
Cánceres, escorpiones, acuarios, sagitarios
nadando en la pecera de mis sueños,
como el joven obrero aquel, en Guayaquil,
que una noche me llevó a su cuarto de madera
donde bajo una débil bombilla, sobre la duela,
había una sábana por cama
y en la pared un clavo por guardarropa de su atuendo.
Qué limpia su pobreza, qué amorosa su hospitalidad,
tanto, que me avergoncé del hotel de lujo
a donde aquella noche yo regresaría cargado
de sucres que no necesitaba y que le di
– para que te compres una camisa que te recuerde al mexicano –
le dije para vencer su resistencia al pago que tranquilizara
mi conciencia por su pobreza inmerecida y mi opulencia,
también inmerecida.
*
O como aquel japonesito brasileño que una noche
de cachaza en Belo Horizonte me acompañara al hotel
y más tarde, por la mañana,
al aeropuerto, donde nos despedimos
como amantes de mucho más que unas cuantas horas, como amantes
verdaderos que se despiden llenos de promesas,
para siempre.
*
Géminis, virgos, aries, libras
de Los Angeles, de México, Caracas, Bogotá,
Lima, Río, Buenos Aires, Madrid, Sevilla o Monterrey,
apurados en la certeza que da la partida inminente,
la seducción irresistible de lo efímero,
la libertad irrenunciable del anonimato.
*
La barbarie en que creciste, amado,
no podré borrarla jamás de tu memoria;
los saltos de tu madre y sus golpes en el vientre
para que no nacieras me duelen más que a ti.
Después de nacido, te dicen, fuiste el mejor,
el bienamado. Y sin embargo,
quién sino yo con mis manos torpes
podría tranquilizar tus noches inquietas,
tus pesadillas de horror.
*
En cierto modo, nuestras infancias se parecen,
sólo que de la mía me separa un medio siglo
y he aprendido a olvidar – o casi.
*
Cómo te amo.
*
Sé que también tuviste por años un amor prohibido,
que no sabías que era amor ni que era prohibido.
Cómo te envidio.
Yo nunca tuve un hermano así.
_____
Xorge M. González (1952-1997)
Ritmo
Fueron los meses de beber Villaurrutia
con las voces del poder de los relojes
Tus iconos lamían la noche
la luna
del espejo ágil se alejaba
Aprendí la distancia
los bosques
la selva aún miedosa
dibujó un cuerpo
Dijo adiós
aquel 6 de diciembre de álamos.
_____
Estos cantos
desenvueltos entre estrellas
declinando días
por los montes que no dicen
y desgarran la mirada
esas nubes de letras
esos bosques antiguos
te dibujan
*
Pudiendo precisar la luna
en una cama sola
veo esas inmensidades
silenciosas ahora
Canto
otros ojos
otras manos
– éstas que juegan con el aliento
de los gestos
*
Entre una naranja y risas
– tan viejos como el amor –
las calles de la ciudad
por donde siempre he andado.
_____
Caminata
Me pusiste en la calle soledad
fui tus pasos y tu historia
fui los encuentros con las verdades de todo precio
Me pusiste en la calle soledad
y me encontré con mis hermanos.
_____
Aún se podrían guardar otras cosas
entre esas papeletas que algun vez dijeron
las cuerdas de tu guitarra
los platos cansados
los regalos de cumpleaños
que pasamos narrando soledades
poemas sin esperanza de ser leídos
La habitual plática de tus presentaciones
y otras noches no olvidadas
*
La traición de la rentera
– y de la piadosa amiga –
nos had pedido nuestra intimidad sola
de algunos miles de pesos
para dejarnos
– sin saberlo –
más juntos.
_____
Amargos pasos gritan la noche;
bailan en el abierto estómago,
llave del dolor
de la espera del amanecer
de besos y frutas y ojos;
beben los faunos.
*
Me desnudaron no sé ni día ni hora
bajé
con la misma soledad de Isthar
a beber los presagios de divinidades
telúricas.
*
No sé ni día ni hora
en mares de luz
aparecieron los rostros míos.
_____
Antonio García (nace 1956)
Des
nudo
estoy
en
el
umbral; ven,
tu cuerpo ansioso
de la ternura
y frenesí, de
la locura de
mis manos,
a tientas,
a ciegas te
traerá por el
camino sin reclamos.
“Ven”. Sólo otra vez,
yo te digo:
“Ven.
Aquí
espero.”
Lo sé
– y házle
como quieras
– vendrás
tu cuerpo a
compartir conmigo.
_____
Estatua en paraiso
Y los esperamos
se confundieron en el mismo instante
Luego vino Luego queso
Vino el beso
Vino el yeso y quedó tieso
descansando en la llanura amplia
de su vientre amado, de su vientre dueño
Petrificado
Esbozando una sonrisa quieta
desde el sueño-vuelo de su pedestal eterno
Esbozando una sonrisa quieta desde su alma
que pasaba aquel invierno.
_____
Cucaracha’s Inn
Cucaracha en
pared muerta envuelta
pobre
de mí y de ella no
hubo comida
está suspendida es pera
espera
su tiempo es pera
el tiempo es perra
y espera
tocar el cielo
y nuestros huesos.
Alejandro del Bosque (nace 1965)
Los nopales
Desde su asiento
él observa la noche capada de estrellas,
copada de ambos.
A su lado yo dormito.
El sigue mirando sin saberse mirado.
La otra vez viajé solo.
El sol se desmayó en la carretera
durante varias horas,
y en el interior del autobús había frío.
El pequeño televisor, casi echado en mí,
proyectaba una película fastidiosa.
Afuera, algunos nopales parecían viejos discutiendo
con los brazos extendidos,
en la espera de asestar un golpe débil;
otros simulaban saludarse entre sí,
como preservando las buenas maneras.
El trayecto será largo.
El busca otra posición
Para estar menos incómodo.
_____
El Volante
Eluno espera a que llegue Elotro.
Elotro sabe que Eluno lo espera.
Eluno fuma los cigarros de Elotro.
Elotro los busca en la bolsa de su camisa.
Eluno mira hacia el camellón.
Elotro maldice a quien se pasó un rojo.
Eluno sonríe a quien le sonríe y cruza la calle.
Elotro recuerda que hay poca carne en el refri.
Eluno conversa animoso moviendo los hombros.
Elotro piensa en las ofertas del martes.
Eluno recibe una tarjeta y promote comunicarse.
Elotro marca y nadie contesta.
Eluno identifica la llamada y apaga el celular.
Elotro arroja el aparato al asiento trasero.
Eluno entra a una fonda y ordena comida corrida.
Elotro detiene su auto y recarga la cabeza en el volante.
_____
La peluca
A cierta hora del día
el metro es un reclusorio de hombres y mujeres separados,
pero Elella se escabulle
y viaja en el vagón de los varones.
Todos los obreros para mí nomás,
– va pensando Elella –
que lo quiere todo, no más, no menos.
La recibe un silbido de mira qué forro de vieja.
Ella se deja hacer.
Le pellizcan las nalgas.
Le aprietan las tetas.
Le muerden los labios.
Le embarran sudores.
Ellos se dejan hacer,
pero Elella necesita cambiar de estación.
Elella se va con un silbido de vuelve pronto mamacita,
acomodándose la rubia peluca,
ciñéndose la morada vida que se le va cayendo.
_____
El amado
Hombre mío
que estás tan lejos,
amado sea tu recuerdo,
ignorado sea tu desprecio;
olvida a quien me besa
como yo también olvido a quien te toca;
no me dejes,
que el dejarnos aún hiere,
y libérame de todo yo.
Alejandro del Bosque (born 1965)
The prickly-pear cactuses
From his seat
He observes the night caped by stars
By his side I snooze.
He continues gazing out not knowing that he’s being looked at
That other time I travelled solo.
The sun faded upon the highway
Over several hours,
And inside the bus it was cold.
The little TV, almost falling on me,
showing an annoying film.
Outside, some prickly-pear cactuses seemed like old people arguing
With arms extended,
In the hope of striking a feeble blow;
Others were pretending to greet one another,
As if maintaining the tradition of good manners.
The journey will be a long one.
He shifts his position
So he’s less uncomfortable.
*
The steering wheel
The One hopes that the Other arrives.
The Other knows that the One is waiting for him.
The One smokes the cigars of the Other.
The Other searches for them in the pocket of his shirt.
The One looks toward the traffic island.
The Other curses the guy who ran the red light.
The One smiles at someone who smiles back at him and crosses the street.
The Other remembers there’s not much meat in the fridge.
The One chats,his shoulders going up and down, excited.
The Other thinks about the Tuesday specials.
The One takes a business card and promises to get in touch.
The Other dials and nobody answers.
The One sees who’s calling and turns off his cell.
The Other throws the phone into the back seat.
The One goes into a greasy-spoon and orders food to go.
The Other stops the car and puts his head down on the steering wheel.
*
The wig
At a certain time of day
The subway trains (in México City) are a prison of men and of women
– separated (by gender),
But HimHer slips through
And travels in the male car.
“All the Regular Joes just for me,”
– HimHer goes in thinking –
Wanting it all – no more, no less.
Got whistled at:
“Look at her – what an ass she has.”
She lets them…
They grab her buttocks.
They squeeze her nipples.
They bite her lips.
They cover her with their sweat.
They let themselves do it…
But HimHer has to change stations.
HimHer, exiting the subway car, gets whistled at:
“Come back soon, mamacita.”
Adjusting the blonde wig,
Girding herself for this tough life that’s going down…
*
The belovéd
Man of mine,
You who are so far away,
Belovéd be the memory of you,
Ignored be your disdain;
Forget whoever kisses me
As I forget whoever touches you
Do not leave me,
Even as our breaking up still hurts,
And free me from all that is myself.
Traducciones del español al inglés / Translations from Spanish into English: Alexander Best
_____
Estos poemas son parte de una compilación © Arnulfo Vigil y Ernesto Castillo.
Los redactores escriben:
“Lo importante, a fin de cuentas, no es la sexualidad de un poeta
sino el tratamiento poético de la diversidad sexual.”